Un ejemplo de reconversión, desde su uso como sede del equipo náutico Alinghi en la competición de la Copa del América, hasta gran nave para la creatividad y la innovación.
La Base, cuya circunferencia casi abarca una manzana, dejó de albergar velas para ser escenario cambiante. La obra de la artista urbana Hyuro cubre una de sus principales fachadas, en un trabajo de identidad comandado por la agencia valenciana CuldeSac. En la pintura, decenas de personas parecen caminar entrelazadas. En el interior de La Base, esos mismos caminos suelen cruzarse bien en eventos públicos, como foro de debate, como sala expositiva, como almacén de arte, como sede corporativa… Un punto de encuentro imprevisto.
Está bajo el manto de La Marina de València, la franja de territorio que ejerce de bisagra entre la ciudad del mar y la que está más allá del agua.