En la planta baja de un edificio de principios del siglo XX, en la icónica calle de la Paz de Valencia, se encuentra Birlibirloque bar, un espacio que combina funcionalidad y diseño para ofrecer una experiencia versátil durante todo el día. Este es el hermano pequeño del reconocido restaurante Entrevins, ubicado en la primera planta del mismo edificio. Ambos espacios comparten el sello de Cosín Estudio, encargado del interiorismo y el amueblamiento, creando una armonía visual y conceptual que conecta las dos propuestas.
Birlibirloque evoca el espíritu de las cafeterías de los años setenta, aquellas donde podías detenerte a cualquier hora del día para disfrutar de un café matutino, un almuerzo rápido, una cena relajada o una copa al caer la noche. Para capturar esa esencia, el diseño ha dotado al local de una variedad de modos de uso: desde la barra, perfecta para un momento casual, hasta mesas altas compartidas, bancos corridos de madera que invitan a la conversación, o las mesas tradicionales que fomentan la intimidad. Además, el espacio incluye una zona privada para grupos, situada junto a la bodega.