En los alrededores de la Plaza Xúquer, Bastard Coffee & Kitchen irrumpe con una decoración decadente de estilo industrial y una carta que fusiona la comida estadounidense con la mediterránea, pero dándole su propia imprenta
Una gran sala diáfana, cruda, que reproduce las viejas naves norteamericanas donde imaginar grandes proyectos. Un oso inmenso, sobre una pared, nos mira con voracidad.